Los beneficiarios de planes de seguro ERISA que me han estado siguiendo durante algún tiempo probablemente saben que no tienen tantas opciones disponibles para demandar a sus aseguradoras. No puedes castigarlos por actuar de mala fe. No puedes obtener daños y perjuicios. No puedes demandar por dolor y sufrimiento.
De hecho, lo único que realmente puedes esperar si ganar tu apelación es obtener los beneficios que deberías haber recibido en primer lugar y (si tienes suerte) hacer que la aseguradora pague tus costos legales. Aún así, hay varios códigos diferentes que definen los “remedios” que están disponibles para ti, y si estás considerando presentar una apelación, es importante que los entiendas de antemano.
Los Cuatro Códigos que Definen los Remedios de ERISA
- 1. 29 U.S.C. 1132(a)(1)(B)
- Tienes la capacidad de recuperar cualquier beneficio que se te deba según los términos de tu póliza
- Puedes hacer valer cualquier derecho que te otorgue la póliza
- Puedes aclarar cuáles son tus derechos para futuros beneficios bajo la póliza
- 2. 29 U.S.C. 1132(a)(2) – Este código actúa como un remedio contra un fiduciario del plan por incumplimiento del deber
- 3. 29 U.S.C. 1132(a)(3)
- Tienes la capacidad “de prohibir cualquier acto o práctica” que vaya en contra de los términos de la póliza o cualquier disposición en el Título I de ERISA
- Tienes la capacidad de obtener “otras…medidas equitativas” mediante:
i. Corregir violaciones del plan
ii. Hacer cumplir el Título I de ERISA o cualquier término de la póliza
- 4. 29 U.S.C. 1140 – Tienes la capacidad de presentar una demanda contra cualquier persona que bloquee los derechos que se te han otorgado bajo ERISA o los términos de la póliza.
Lo que Realmente Significan los Cuatro Códigos
Todo eso suena muy bien, pero en muchos sentidos es simplemente decir lo mismo de cuatro maneras diferentes. ¿Por qué digo eso? Porque el resultado para ti siempre es el mismo si ganas: todo lo que puedes obtener son los beneficios que ya deberías haber recibido y dinero para cubrir tus costos legales.
Aún así, es valioso saberlo para que tu abogado pueda atacar y hacer referencia a los códigos apropiados al presentar la demanda y preparar tu estrategia. En este tipo de casos, el lenguaje y el procedimiento importan, así que definitivamente necesitas a alguien de tu lado que haya estado allí antes.
Sea lo que sea que hagas, asegúrate de trabajar con un experto en discapacidad en quien confíes y que conozca esta área de la ley. No juegues con tu salud. ¡Consulta nuestro e-book gratuito para obtener más detalles sobre la discapacidad de ERISA y asegúrate de mantenerte al día sobre nueva información sobre discapacidad a largo plazo a través de nuestros blogs semanales!